martes, 31 de marzo de 2009
domingo, 29 de marzo de 2009
Calles cruzadas
viernes, 27 de marzo de 2009
En el balcón
(¿Julieta lo habrá mirado a Romeo desde esta altura?)
Otra vez la ventana, otra vez la discusión, los gritos y las sienes latiendo al compás de las olas de ira. No sabemos manejar estos sentimientos, se descontrolan tan fácilmente; somos pequeñas bombas de tiempo, tic tac, esperando a estallar.
(Hay que prenderle fuego el patio)
Te acercaste lentamente a mí y me pediste un abrazo. Nos acercamos, aunque el escozor del enojo aún nos molestaba. Pasaste tus brazos alrededor de mi cuerpo, por detrás, de cara al frío que nos enfrentaba. Balbuceaste algo, no logré entenderte.
(Hay que prenderle fuego el patio a la vieja de abajo)
Intentaste girarme, que te mostrara la cara, pero no lo lograste; enganchada del marco, yo conspiraba para cometer mi próximo crimen. Ya la discusión no importaba, habías perdido mi atención. No podía permitir que me arrancaras de mi fogoso ensueño.
(Podré hacerlo desde aquí, con un poco de alcohol?)
Las manos me dolían por la fuerza que ejercías sobre ellas con las tuyas. Intentaste morderme el cuello, te golpeé bruscamente con mi codo. Te alejaste, vencida. Mi reacción no alcanzaría nunca la velocidad de mi pensamiento.
(Sí, es fácil, sólo un trapo viejo y buena puntería)
El humo subía, trepaba por la pared como una araña asustada. Fuiste la primera en salir, yo gateaba detrás tuyo, tapándome la boca. Te perdí al girar en el pasillo, no supe continuar; tranquilamente me senté a esperar que mi mente se envolviera en llamas.
martes, 24 de marzo de 2009
Preguntas inútiles
lunes, 23 de marzo de 2009
El primer día de la costumbre
Sin querer llegaron hasta mí éstas palabras: "Me podrán robar tus días. Tus noches, no." Me golpearon en el estómago, las perras negras siempre lo hacen: después se trepan hasta mi cabeza y acampan ahí durante semanas, meses, sin intención de marcharse. Y empezaron a llenar de humo todos los espacios libres de mi cabeza con sus fogatas de hojas secas. (A quién se le ocurriría dejarlas tomarse tal libertad?)
-"Tus noches no son sus noches" - me balbuceaban por lo bajo.
-"Vos no sos dueña de su tiempo, ni lo vas a ser"-.
Al principio sólo eran comentarios que podía ignorar. Pero después se inventaron (y reinventaron) mil y un maneras de llamar mi atención. Saltaban por todos lados, a cada oportunidad que tenían: se habían pasado horas agazapadas esperando que tropezara con un segundo de paranoia, de terror absurdo, para contraatacar con toda su artillería.
-"Se van a alejar este inverno! Ella no te va a compartir sus mañanas! Se va a dejar ganar!"-. Se sacuden de encima la modorra, gritan cual oso embravecido, toman carrera y se impulsan hasta mis dedos a través de mis venas, que escupen en estas frases mi peor pesadilla.
domingo, 22 de marzo de 2009
Estar...
Luz, día, ojos verdes, corazón, mariposas en la panza, camisas y vestidos, figuras heteronormativistas que se desdibujan en nuestras manos tomadas al caminar por la calle, la emoción de tener un beso de tus labios, sentirnos diferentes al resto. El dragón del futuro esperándonos, el dragón del pasado acechándonos. Miedo y lujuria. Confianza y palabras. Empujones y juegos bruscos, “los chicos siempre se tiran de los pelos después de jugar”. Horas de cavilaciones y entresueños buscando tu mano que me alcance. Discusiones cortadas, alejamientos sin abrazos, reconciliaciones dolorosas. Regalos que nunca me habían hecho, dulce y salado, prácticas de cocina, tu cepillo de dientes en mi baño. Sombra, lo que fui y lo que puedo ser. Tus celos, mi frustración, tus y mis amigos, noches de tele. Dormirme en tus brazos y despertarme sola, no recordar tu beso de despedida. Pedir perdón, pedir abrazos, pedir más de lo que puedo tener, pedir más y más. Obligaciones incumplidas. Deseos incompletos, enojo de amante resentida, un recital fuera de la ciudad; todas las cosas que no puedo darte, porque me las robaron, porque no las tengo, porque me faltan ganas, porque me paraliza el pánico. Una escena vergonzosa, el dolor de estómago, sentarme en la ventana a oler el frío de la luna. Saber que nunca fue fácil, que nunca lo va a ser, y elegirlo igual… buscar el significado del amor, límites de lo que se puede hacer, esperar, tomar y quitar, dar y entregar. A la fuerza, jamás. Sentirme acorralada, sentirte presionada, dibujar líneas que ni siquiera pensábamos mover, ponerle tiempo a todo… preguntar qué es lo que buscás en mí, preguntar qué es lo que espero de vos. Si te amo o no, si te adoro o no, darse por vencida o no, si somos tan diferentes o no, decisiones que quiero o no quiero tomar.
Quién puede darnos la respuesta?
jueves, 19 de marzo de 2009
Prioridades
Diez cosas que amo
1. Ver a mi chonguito sonreír.
2. Charlas con Lulu y mate.
3. Sir Lancelot, mi hijo gatuno.
4. Maratones de animé con la troupe nerd.
5. A los abuelos y todo lo que ellos cocinan.
6. Té con golosinas después de cenar.
7. Las tardes de tormenta con un buen libro.
8. Cocinar algo rico para alguien que quiero.
9. El papel de colores, blanco, a rayas, a cuadritos, grande, chico, estampado, opaco, brillante….
10. Salir de la ducha en invierno y que la toalla esté calentita.
Diez cosas que odio
1. Que no me dejen dormir (los vecinos)
2. Levantarme temprano
3. Levantarme temprano y que no haya leche para mi cuicui.
4. Llorar y que me duela la cabeza después.
5. Las cucarachas que Sir deja en la puerta de mi pieza.
6. Los clientes indecisos (son fotocopias!!!!!!!!!!!)
7. La impuntualidad.
8. Que traten de imponerme lo que sea.
9. Las peleas y discusiones interminables.
10. Que las leyes de este país no protejan los derechos de los homosexuales.
Diez cosas que debo hacer.
1. Dejar de colgarme con la facultad.
2. Ponerle más onda a la vida.
3. Empezar a hacer ejercicio (preferentemente algún tipo de baile).
4. Llamar (más) a mis amigos.
5. Divagar más para tener menos estrés.
6. Limpiar más seguido.
7. Tomarme una hora para escribir todos los días.
8. Actividades al aire libre (ir a la plaza a leer cuenta).
9. Perderle el miedo a los exámenes.
10. Conseguir las series y películas que siempre digo que voy a comprar y nunca lo hago.
Diez cosas de las que no me arrepiento.
1. Haber amado con locura.
2. Seguir amando a pesar de haber sufrido.
3. Haber sido una ñoña durante el primario y secundario.
4. Crecer a los golpes en 2 años.
5. Salir del clóset
6. Jugarme por mi independencia cuando todavía era una pendeja.
7. Haberle dedicado más tiempo a vivir a mi manera.
8. Elegir una profesión poco redituable (pero me llena tanto el alma).
9. Desperdiciar un día de sol por una noche estrellada.
10. Comerme todo el día de mi cumpleaños, a pesar del ataque al hígado que llega después.
Gracias Lau por elegirme para continuar esta cadena, aunque no sé a quién pasársela! Alguien se ofrece voluntariamente...?
"Las muñecas son terribles. ¿Y porqué no? Si lo es el animal, la piedra, el hombre. En el poema se desocultan las muñecas y otras cosas que son noche. El poema, la noche. ¿Conocés vos la noche?" Alejandra Pizarnik.-
sábado, 14 de marzo de 2009
Nuevas alas
Suturando las heridas. Aparece ella y el olor del invierno se acerca, invadiendo cada anochecer, cada momento de soledad. Ella, la última tarde de amor es revivida, imágenes borrosas en mis recuerdos. Intentos fallidos de honestidad, siempre las intenciones se interponen, tus prejuicios, mis chistes estúpidos. Dónde termina nuestro camino? Un momento de perfección, dos años más tarde… El tiempo pasó, no tendremos más segundos para admirar, ni horas para silenciarnos. No supe verte, no sabía mirar a mi alrededor. No entendiste mi dolor, no entendí tu furia. Así, en una hamaca, en una noche de otoño, fuimos más sinceras que nunca, sin necesidad de usar palabras. Sólo me empujaste hacia delante… y volé alto, más alto de lo que jamás había volado mi alma… La compensación a todas las lágrimas fue el balanceo de mi cuerpo en ese vuelo tan corto, rozando la tierra con mis pies, tratando de no perder el equilibrio.
La niña que solía ser y que te llevaste se sintió feliz de saber que alguien guardaba sus juguetes, las cintas del pelo, las notas de su risa; que no sólo ella escondía los objetos más pequeños y preciados en su bolsillo, que alguien la había visto crecer…
El regalo más simple que podías darme, el más hermoso, un instante de perdón sin siquiera mirarte a los ojos…
jueves, 12 de marzo de 2009
Mis "diez canciones para pegarse un tiro un domingo de lluvia"
El orden no es relevante...
1- High and Dry (Radiohead)
2- Lonely day (System)
3- Broken (Seether)
4- A martyr for my love for you (White stripes)
5- It's been a while (Staind)
6- In the cold light of morning (Placebo)
7- Glory box (Portishead)
8- Wicked game (No la versión de Him, la original)
9- Iris (Goo Goo Dolls)
10- Lady of the flowers (versión de placebo)
Sujeto a cambios....
Y las tuyas cuáles son?